domingo, 30 de junio de 2013

Tarta cookies y vacaciones de verano para mi.


 ¡Oe,oe,oe,oe,oe,oe!!

Vacaciones de verano, para mi... Vacaciones de verano, para ti... (musiquita de fondo como la del anuncio)

Y es que no hay nada más gratificante durante el año que, poooor fin, lleguen las vacaciones de verano, que acabe el curso y que podamos relajarnos durante dos meses.

Fuera exámenes, ¡bien!!.
Fuera deberes, ¡bien!!.
Fuera actividades extraescolares, ¡bien!!.
Fuera revisiones de mochilas, ¡bien!!.
Fuera madrugones, almuerzos, meriendas preparadas a las 4 de la tarde, prisas al llegar a casa para duchas, cenas..... ¡ bien, bien, bien!!!!.


Eso sí, como toda madre que se precie, he acabado el curso escolar a lo grande: con obra de teatro, bandera y disfraz caseros incluidos. Y es que esto es peor que cuando una estaba estudiando, oigan; porque ser padres en el siglo XXI es muuuu pesao. Ya no vale eso de: niño, haz los deberes; niño, estudia. No, no, no. Ahora, no nos conformamos con eso. Ahora, tenemos que controlar hasta el último detalle exhaustivo de nuestros niños: cuando es el examen, de que, si ha hecho los deberes, si le han preguntado, si ha jugado, si se ha peleado o si ha tenido bastante con la botellita de agua que les hemos puesto. ¡Uf,uf,uf!!


Por eso, cuando llega el 21 de junio, descansamos tooooodos, niños y mayores, y como hay que empezar a coger energías desde ya para el nuevo curso, aquí va esta ¡supertarta de cookies!!
Ñam,ñam,ñam, ¡requeteñam!


Así que, ¡vamos con ella!: La receta es del libro de Alma Obregon, Objetivo tarta perfecta, con alguna variación made in Eva.


 Para el bizcocho:

- 200 gr. de mantequilla a temperatura ambiente.
- 200 gr. de harina.
- 2 cucharaditas de levadura.
- 4 huevos.
- 1 cucharadita de pasta de vainilla (yo he puesto dos de aroma de vainilla ).
- Un buen puñado de chips de chocolate pasados por harina (para que no se vayan al fondo).

Para el relleno de galleta:

- 200 gr. de azúcar moreno.
- 125 ml. de leche.
- 90 gr. de harina.
- 125 gr de mantequilla a temperatura ambiente.
- 2 cucharadas de chips de chocolate.
- 1 cucharadita de vainilla en pasta (yo he puesto dos de aroma de vainilla).

Para la cobertura:

Aquí Alma usa la receta de merengue italiano con dos cucharaditas de vainilla en pasta. Yo he preferido usar mi crema preferida... ¿Adivináis cual??.

- 400 ml. de nata para montar, con más del 35% de M.G.
- 250 gr. de queso mascarpone.
- 100 gr. de queso fresco.
- 4 cucharaditas de aroma de vainilla.
- Azúcar glas al gusto.
- 1 bolsa de minicookies.

¡Al lio!!!!:

Precalentamos el horno a 180º.

Empezamos con el bizcocho:

Para dos moldes de 15cm.

Batimos la mantequilla y el azúcar hasta que la mezcla se aclare. Incorporamos los huevos uno a uno, batimos y añadimos la harina y la levadura tamizadas. Por último, mezclamos la vainilla y los chips de chocolate.

Vertemos en los moldes y al horno unos 40 minutos. O hasta que al pinchar con el palillo éste salga limpio.



Desmoldamos cuando esté templado y lo dejamos enfriar por completo sobre una rejilla. Tapamos con film transparente y a la nevera hasta que montemos la tarta.

El relleno de galleta:

En un cazo calentamos la leche mezclada con el aroma de vainilla y el azúcar. Removemos hasta que se disuelva (la leche tendrá un tono marrón claro). Pasamos la leche a un bol, añadimos la harina y batimos enérgicamente con unas varillas para que no se formen grumos. Añadimos la mantequilla, batimos de nuevo e incorporamos los chips. ¡Ojo!!!!!, hay que esperar que se enfríen, porque aquí, la menda, metió la pata y los puse como pone la receta  " a continuación " y a continuación se me derritieron tooooodos. Por eso mi relleno está un pelín más oscuro, pero luego le añadí otro puñado de chips de chocolate y me quedé más ancha que larga. Jeje.

La cobertura:

Pues lo de siempre: batimos los dos quesos con la vainilla y añadimos la nata cuando empiece a montar. Incorporamos poco a poco el azúcar glas y seguimos batiendo hasta que esté completamente montada.

Y, ¡a montarla!:

Cotamos los dos bizcochos por la mitad. Yo no me atreví a usar los cuatro y sólo puse tres (el que me sobró junto con la crema de relleno que me sobró, se convirtió milagrosamente en cake pop....¡Ñaaammmm!). Rellenamos cada capa de bizcocho con la crema de relleno.Yo, para que me fuera más cómodo, la metí en una manga pastelera sin boquilla y corté la punta, pero podéis ponerla con la espátula sin problemas.




Cuando ya tengamos nuestras capas de bizcocho rellenas, nos ponemos a cubrir la tarta con la crema de mascarpone, sin miedo (en abundancia vamos) y decoramos con las mini cookies.


He usado una espátula decorativa con muescas para los surcos que veis. Sólo hay que bordear la tarta con ella y, para ser la primera vez que lo hago yyyyyy ¡sin plato giratorio!!!, no me ha quedado tan mal, ¿no?.
Para los bordes he usado la boquilla 2D de wilton.



Y ya sólo queda, ¡comérnosla!!!. Está de vicio, buenísima. Y a los peques les va a encantar. Como siempre que he usado una receta de Alma Obregón, estaba exquisita.


Besazos a mogollón:

Eva.













domingo, 23 de junio de 2013

Tarta Kit kat con m&n y cumpleaños de mi hombretón.



Ya está aquí. Otra vez. Ya ha llegado...

Y es que, a la que me quiero dar cuenta, se pasa otro año y, ese niñito tan débil e indefenso de hace ¡11 añazos!!!!, ya no está por ningún sitio. Se ha convertido en un hombretón, que no tiene nada de debilucho, casi más grande que yo y de guapo, ¡pa morirse!!


Y claro, este año, como mamá tiene un blog, había que lucirse, pero con sus normas claro: nada de muñecotes ni fondant ni sabores raros...

Así que, entre las ganas que le tenía yo a esta tarta, y lo que les gusta a estos hombretones el kit kat y los m&n, la ocasión ¡la pintaban calva!

¡Aleeeee!!! Tarta kit kat / m&n gigantesca para hombretones. ¡Éxito rotundo, señores y señoras!


Así que, vamos con la receta.

Para el bizcochazo:

Precalentamos el horno a 170 grados:

Hice la receta de coca de yogur todo terreno de mi casa de toda la vida, multiplicada por dos (a lo grande), que sale riquísima y que, para estas tartas tan grandes, es supercómoda y fácil de hacer.  Utilicé un molde redondo de 26cm y lo forré con papel vegetal así:



Los ingredientes:

- 2 yogures griegos (podéis utilizar los que tengáis en casa; incluso yo alguna vez la he hecho con desnatados y queda superbién)
- 4 medidas de yogur de azúcar.
- 4 medidas de yogur de harina tamizada.
- 2 medidas de yogur de aceite de girasol.
- 1 sobre de levadura.
- 1 cucharadita de bicarbonato
- 2 medidas de yogur de cacao en polvo sin azúcar (si no tenéis, quitar media medida de azúcar y listo )
- 8 huevos.
- Un puñado de chips de chocolate pasados por harina.

Y no tiene más misterio que coger un bol grande y mezclar todos los ingredientes. Batimos dos o tres minutos hasta que esté todo bien integrado y mezclamos los chips de chocolate con ayuda de la espátula de silicona.

¡Al horno! Yo lo tuve una horita. A los 20 minutos lo tapé con papel de aluminio y, a partir de los 40 minutos, lo pinché cada 10 con el palillo, hasta que estuvo hecho.

Lo dejamos sobre la bandeja del horno 10 minutos, desmoldamos y ponemos sobre la rejilla boca abajo hasta que esté completamente frio. Entonces envolvemos en film y a la nevera hasta el día siguiente.

Para el ganache de chocolate:

- 600 ml. de nata con más del 35% de M.G.
- 400 gr. de chocolate negro para cobertura con más del 70% de cacao.

El día de antes de montar la tarta, ponemos a calentar la nata con el chocolate hasta que esté totalmente disuelto. Dejamos enfriar en un bol y cuando esté frio lo tapamos con film transparente, que el film toque el chocolate (esto evitará que se seque la superficie). Y lo metemos en la nevera hasta el día siguiente, que lo único que tendremos que hacer es batirlo cuando vayamos a montar la tarta.

Para la decoración:

- 3 paquetes de m&n de 200g.
- 3 paquetes de kit kat de esos que llevan 5 paquetes dentro.

En resumen, ¡mogollón de m&n y mogollón de kit kat!!

¡A montar el tartón!!

Cortamos el bizcocho en tres partes iguales. Colocamos una sobre la superficie que vamos a utilizar para nuestro tartón. Y ahora os voy a confesar un secreto: yo, lo rocié con sirope de chocolate... ¡Ahhhhh!!! Lo sé, lo sé. No era necesario, pero es que, me dije: total Eva, el bote está casi bacio, así te lo quitas de encima... Total Eva, son niños de 11 años, te lo van a agradecer... Total Eva, nadie tiene por que enterarse; sólo dirán, ummmm que bueno y que sabor a chocolate...  (claro, que eso lo dirán las madres, porque los niños sólo engullirán sin parar. ) TOTAL, que no tengo arreglo y puse sirope de chocolate y una buena capa de ganache en los tres bizcochos. ¡Ala!



Después, cubrimos toda la tarta con otra buena capa de ganache, no tanta como si la fuéramos a decorar así, pero con alegría vamos.



Y ahora viene lo mejor de lo mejor: ¡a decorar!:

Primero ponemos los kit kat, cortamos cada tableta por la mitad, de manera que nos queden barritas de dos, y las vamos colocando alrededor de la tarta. ¡Olé!



Cuando ya tengamos todo el tartón rodeado de kit kat, cogemos las tres bolsas de m&n, las abrimos y como si no hubiera mañana las volcamos en la tarta. ¡Ole, ole y ole!!!.

La cinta es para que quede todo bien sujeto, y porque la verdad, queda monísima.



Y ya está: ya tenemos un supertartón, para una superfiesta de superhombretones.



La fiesta fue un éxito y el cumpleañero quedó encantado, a las pruebas me remito...



También hice estas galletas de caras sonrientes, ¡que tuvieron un éxito tremendo!


Y, hasta aquí el cumpleaños de mi hombretón... ¡Muchas felicidades Pablete!!!!! El año que viene más. ^_^

Besazos a mogollón.

Eva.

sábado, 15 de junio de 2013

Brownie cheesecake con crema de frutos rojos y tiempo de verano.


¡¡¡¡Poooor fííínnnnnn!! ¡Por fin!!! ¡Por fin!!!! Ha llegado el calor. ¡Ole, ole!!

¡Ya era hora! A destaparse se ha dicho.Fuera chaquetas, botas, pañuelos y demás. Bienvenidos pantalones cortos, vestidos, chanclas y biquinis. 

Ya veis que tenía muuuchas ganas de que se fuera el triste invierno, y es que, sí, a mí lo que más, más me supergusta del mundo entero (entre otras cosas) es el verano. Y encima tengo la suerte de vivir en un pueblo estupendo con su estupenda playita.



Claro que también tiene sus cosas, porque  inauguramos la temporada playera. La temporada playera, con: su arena, sus cremas solares chorreteando en el bolso, los bocatas de chorizo llenos de arena yyyyy el bolso playero. Eso si que es pesao. A saber: la toalla del niño, la de la niña, la del mister y la mía, los cubos, las palas, el rastrillo, las cremas correspondientes de cada uno, la neverita, la sombrilla, el ebook, la revista, el periódico... ¡Uf! Ya estoy agotá sólo de pensarlo...

Pero, todo eso merece la pena, en el mismo instante en que mi pandero toca la toalla, cojo mi libro y ya no existe nadie más. A mi que no me vengan con historias hasta el momento de recoger el chiringo. Ya puede llamarme quien me llame o salir la misma Mobi Dick del agua, que yo, de mi toalla, no me muevo.

En fin, que damos por inauguradas las aventurillas de verano. Y para esos días playeros (o piscineros, que oye, todo vale), que  llegas a casa agotada de sol, niños, toalla, arena.... ,a mí no se me ocurre una manera mejor de relajarme que coger un trozo de esta maravilla con un batido bien fresquito y sentarme delante de la tele a zampármelo. ¿A qué sí?



Pues vamos con la receta ¡Qué ya estamos tardando!:

La receta es de el blog de Megasilvita. (entrad a conocerla, porque os va a gustar mucho), con algunas modificaciones.

Para un molde rectangular de 27 x 20 cm.

El brownie:

- 200 gr. de chocolate negro.
- 200 gr. de mantequilla a temperatura ambiente.
- 250 gr. de azúcar.
- 3 huevos.
- 110 gr. de harina.

El pastel de queso:

- 400 gr. de queso cremoso tipo philadelphia.
- 150 gr. de azúcar (se supone que es blanca, pero yo y mi cabeza nos quedamos sin azúcar y usé la mitad de cantidad de azúcar glas;  la verdad, fui probando hasta que me pareció que estaba bueno...).
- 1/2 cucharadita de extracto de vainilla.
- 2 huevos.

Cobertura:

- 200 ml. de nata con más del 35% de M.G.
- Azúcar glas al gusto.
- 2 cucharadas de gelatina en polvo sabor frambuesa (yo usé la de Hacendado).
- 1 bote de frutos rojos en almíbar (también usé el de Hacendado. Jeje. Este tío se forra conmigo...).

Aunque parece mucho lio, no lo es tanto. En serio, yo lo he hecho en 20 minutos más el tiempo de horneado. Y el resultado merece la pena, así que vamos al lio:

Encendemos el horno a 170 grados con calor arriba y abajo y engrasamos el molde.

Para el brownie:

Derretimos el chocolate en el micro a temperatura baja y en periodos cortos hasta que esté en su punto.

Batimos la mantequilla con el azúcar, añadimos los huevos uno a uno, batimos y, seguidamente, incorporamos el chocolate derretido. Cuando esté todo bien mezclado, le añadimos la harina tamizada y la mezclamos manualmente con la ayuda de la espátula de silicona. Lo justito para que se integre.

Vertemos la masa en el molde, extendemos bien y reservamos.





 









Para el pastel de queso:

 Ponemos el queso con el azúcar y el extracto de vainilla en un bol y batimos bien hasta que todos los ingredientes estén integrados.

Añadimos los huevos uno a uno y batimos. Vertemos la masa encima del brownie con cuidado y,  ¡al horno!
Unos 30 o 40 minutos.



Para la cobertura de frutos rojos:

Ponemos los frutos rojos en un colador, reservando unos pocos para adornar, y machacamos con un tenedor hasta que nos quede una pasta.


 
Los ponemos en el colador para que escurra todo el líquido.

Batimos la nata hasta que empiece a montar.  Entonces, poco a poco, vamos echando el azúcar seguida de la gelatina. Seguimos batiendo hasta que esté totalmente montada. Depués añadimos la pasta de frutos rojos y mezclamos manualmente.



¡Y a la nevera! En unas 4 horitas lo tenemos fresquito y listo para comer. Yo, no lo desmoldé; aunque si queréis lo podéis hacer, pero ponerle un papel vegetal al molde.



Mi hermano, que fue el primero en probarlo, lo tuvo claro: ¡espectacular, hermana!!.

Y no me enrollo más, que disfrutéis del fin de semana y de este summer time tan maravilloso que, ¡pooor fííín tenemos!!



Besazos a mogollón.

Eva.













sábado, 8 de junio de 2013

Cupcakes de peras al vino tinto, concurso y un recuerdo especial.



¡Voy a participar en un concurso! ¡Ya está! ¡Lo he decidido! ¡Ole!


Desde que vi en el blog de cupcakeslosophy que organizaba un concurso de cupcakes (eso, y que por una vez lo vi con más de una semana de antelación) , me puse a pensar recetas.  Ale, to el día con los libros en la mano; Y to el día:Miiiguel, ¿qué recetaaaa haaagoooo??? ¿Te gusta esta? ¿Te gusta la otra?? Y él pasando de mi, como siempre.... Cariiiiiiño, la que tú quieeeeraaasssss. Si están todas buenas... ¡Uf!!

Total, que recurrí a mi amiga del alma, Mari, que aunque tampoco sabe decidirse por lo menos me aguanta... Pero tampoco.


En fín, que no sabía que hacer. Y pensando, pensado, me acordé de mi abuelo. Así sin más.  ¡Ayns! ¡Qué hombre más maravilloso!! A mi abuelo le encantaba el dulce (por eso me acordé de él, no porque tubiera una aparición divina, que de momento estoy mal, pero no para tanto...).  Era su perdición. Y uno de los recuerdos que tengo de él es en la cocina haciendo peras al vino tinto. Le encantaban.


Así que me dije: Eva, ya está, tienes que hacer cupcakes de peras al vino tinto.¡Toma ya!

No he encontrado ninguna receta de cupcakes dedicada a ellas, así que con un poco de aquí y un poco de allá, ésta es mi creación. 


Y aquí van. ¿A ver que os parecen?


Para 24 cupcakes.

Para el bizcocho:

- 2 peras conferencia.
- 115 gr de mantequilla a temperatura ambiente.
- 220 gr de azúcar moreno.
- 3 huevos L
- 220 gr de harina.
- 2 cucharadita de levadura en polvo.
- Una pizca de sal.
- 100 ml de leche.
- 50 ml del jugo de las peras.
- 1 cucharadita de canela en polvo.
- 2 palos de canela.
- 1 cucharadita de jengibre.
- 1 cucharadita de extracto de vainilla.
- 1 cucharadita de bicarbonato sódico.

Para el frosting:

- 250 ml de queso mascarpone.
- 100 ml de queso cremoso tipo philadelphia.
- Otra pera conferencia.
- 200 ml de nata con más del 35% de M.G.
- 60 gr de azúcar glas.

Para las peras al vino tinto:

- 350 ml de vino tinto.
- 250 ml de agua.
- 200 gr de azúcar moreno.
- Dos ramitas de canela.

Al lio:

Precalentamos el horno a 170º y preparamos las cápsulas en nuestra bandeja.

Las peras:

Lo primero, cogemos las  peras, las cortamos por la mitad y les quitamos todas las semillas. Las ponemos en un cazo con el vino, el agua, el azúcar y las ramitas de canela. Llevamos a ebullición y dejamos a fuego medio-alto durante 20 minutos.




Retiramos las peras, las dejamos enfriar y dejamos el cazo a fuego alto durante otros 10 minutos más, o hasta que reduzca la mezcla y se parezca a un sirope.

El bizcocho:

Hervimos la leche con los palos de canela y la dejamos templar.

Tamizamos la harina con la levadura, el jengibre, la canela en polvo, el bicarbonato y la sal. Reservamos.

Batimos la mantequilla con el azúcar hasta que se integre. Añadimos los huevos, uno a uno. Echamos la mitad de la harina y batimos (a velocidad baja, ¡o nos llenaremos de harina!). A continuación, vertemos la leche hervida con la canela y volvemos a batir. Ponemos la otra mitad de la harina y batimos hasta que la mezcla esté totalmente homogénea, incorporamos el jugo de las peras y volvemos a batir. Con ayuda de la espátula de silicona, añadimos la pera hecha puré.


Repartimos la mezcla en las cápsulas y al horno. Unos 20/25 minutos, o hasta que cuando pinchemos el palillo salga limpio. Nada más sacarlos, pinchamos con el palillo y pintamos con el sirope. Dejamos enfriar cinco minutos y ponemos sobre la rejilla hasta que estén completamente fríos.


El frosting:

En un bol, ponemos los dos quesos junto con la pera hecha puré y batimos bien hasta que la mezcla se integre completamente. Añadimos la nata y seguimos batiendo hasta que empiece a montar. Entonces vamos agregando el azúcar glas y seguimos batiendo hasta que esté totalmente montada.


Decoración:

Ponemos el frosting en la manga pastelera con una boquilla de estrella ancha, separando una parte para tapar los cupcakes. (esto no es obligado pero a mi me gusta más como queda así )


Ponemos la boquilla sobre nuestro cupcake y empezamos a presionar de fuera para dentro en el sentido de las agujas del reloj hasta que lleguemos al centro. Una vez allí, ¡hacemos una supermontaña de crema!!! ¡¡Ummmmmmmm!!!!
 
 


Cogemos el sirope de la reducción de la peras y, con la ayuda de unas varillas o un biberón, lo vamos echando por encima. Para acabar, yo le he añadido unos chips de chocolate. Yo es que, si no le pongo chocolate a algo, no me quedo a gusto...


Y ya está: ya tenemos nuestros cupcakes de peras al vino tinto listos para hincarles el diente. A mí me han encantado y estoy segura que a mi abuelo, esté donde esté, también. ¡Un besazo desde aquí!!


¡Espero que os gusten! ¡Espero que los hagáis! ¡Espero que me lo contéis! Y sobretoooooodo, ¡¡espero que ME VOTEIS!!!!!! Acordaros, en cupcakeslosophy. Además, os va ha encantar su blog.


Besazos a mogollón

Eva.










domingo, 2 de junio de 2013

Chocolaty coffe layer cake. Placer adulto!!



Buaaaas! ¿Cómo me atrevo? ¿Cómooooo???

¿Qué pasa si unes dos de tús adiciciones? ¿Eh? ¿Qué pasa?

Pues pasa que se convierte en una superadicción superadictiva. Y pasa que no puedes dejar de pensar en ella. Y pasa que, hasta que no acabas con ella, no te quedas a gusto. Y pasa que la operación bikini ya no existe (aunque para el calor que hace...)  ¡Ya no hay nada! ¡Sólo hay eso!!! Todo eso pasa...


Y ahora estareis pensando (y con toda la razón del mundo), ¿y pa qué juntas dos adicciones peazo tontaaaaa? Pues, porque yo, soy así: soy...flojilla.  Quiero decir que, mi cabeza primero dice: no lo hagas, ¡no lo hagas!, ¡no lo hagas!!!!! Pero al final, soy flojilla y acabo haciéndolo.

Total que, si, lo reconzco: tomo café a diario. Soy de esas personas que, si no se toman un café por las mañanas, no son personas. Y si ya lo acompañamos de chocolate...ni os cuento. Es más, cuando estamos de vacaciones, meto prisa a todo el mundo para bajar a desayunar, porque necesito mi dosis... Porque claro, lo de bajar sola, yo no lo contemplo. No. ¡Yo arrastro a mi trupe! Y pobre del que se queje..Ay madre... Me lo voy a hacer mirar, lo prometo; porque no tengo arreglo, con café ni sin él...

Pero bueno, a lo que iba, que me voy del tema. Y no es cuestion de regocijarse en una sola entrada, de tooodos mis defectillos. Mejor, poco a poco.


Así, que vamos con la receta:

Para el bizcocho: La receta es del libro de Peggy Porschen, que he de confesarlo, me tiene prendada. Que digo prendada, me tiene locamente enamorada, tal cual Isabel Pantoja con su marinero de luces.

Para dos moldes de 15 cm. He adaptado las cantidades, pero para que os hagais una idea, ella usa un molde cuadrado de unos 15 cm y, más o menos, dobla todas las cantidades. Menos mal que yo la hice más pequeña, que si no, cae también!! ^ - ^ .

- 125 gr de chocolate negro (mínimo 53% de cacao), picado o en gotas. Yo usé el de 70% de cacao, picado: ¡chocolate a tope!!
- 170 ml de leche.
- 2 huevos.
- 285 gr de azúcar moreno.
- 100 gr de nantequilla, a temperatura ambiente.
- 185 gr de harina.
- 1/2 cucharadita de levadura en polvo.
- 1/2 cucharadita de bicarbonato sódico.
- Una pizca de sal.
- 10g de cacao en polvo (yo puse una cucharadita)


* Cuando pongo cucharaditas, me refiero a las de postre, las intermedias entre las de café y las soperas (Nooo, aún no tengo las tazas medidoras, pero me haré con ellas, seguro)

Para el relleno:

- 2 yemas de huevo.
- 10 cucharadas de harina de maiz.
- 80 gr de azúcar (al gusto)
- 300 ml de leche
- 3 sobrecitos de café soluble

Para la cobertura.

- 400 ml de nata con más del 35% de M.G.
- 250 gr de queso mascarpone.
- 200 gr de queso cremoso tipo philadelphia.
- 100 gr de azúcar glas.
- Un sobrecito de café soluble.
- 2 cucharadas de caco en polvo.

Para el almibar

- 100 gr de azúcar.
- 100 gr de agua
- Un sobrecito de café.

Y además:

- Virutas de chocolate negro (no tengo arreglo) .


Al lio:

Para el bizcocho:

Yo, el bizcocho siempre lo hago el día de antes, lo envuelvo en papel film y lo meto en la nevera tal cual. Así, al día siguiente, está mucho más asentado y podemos trabajarlo mejor.

Precalentamos el horno a 160º . Preparamos y engrasamos los moldes.

Ponemos el chocolate, la leche y la mitad del azúcar en un cazo. Llevamos a ebullición, removiendo con la espátula. Reservamos.

Por otro lado, ponemos la mantequilla y el resto del azúcar en un bol. Batimos hasta que blanquee y se vea esponjosa.

En otro bol, batimos los huevos y los vamos añadiendo, poco a poco, a la mezcla de mantequilla.

Tamizamos la harina, junto con la levadura, el bicarbonato, la sal y el cacao en polvo; y se lo añadimos en dos veces a la preparación de mantequilla.

Vertemos lentamente la mezcla de chocolate mientras batimos.

Echamos de inmediato la mezcla en los moldes y horneamos 30-40 minutos o hasta que pinchemos y el palillo salga limpio.

Para el relleno:

Mezclamos el azúcar, el café y un chorrito de leche en un bol.

En un cazo ponemos a calentar el resto de la leche.

Batimos la mezcla del azúcar, el café y la leche. Le añadimos la yema, batimos un poco más y vertemos la leche caliente. Mezclamos y volvemos a verter en el cazo para ponerlo a fuego lento. Le agregamos la harina, removemos bien con las varillas y dejamos enfriar. Si es necesario cuando retiremos del fuego podemos batir con la batidora para que quede sin grumos.

Para el frosting:

Batimos el queso mascarpone junto con el queso cremoso un par de minutos, hasta que la mezcla sea homogénea. Incorporamos la nata, batimos hasta que empiece a montarse. Entonces vamos añadiéndole el azúcar glas y batimos un poco más, hasta que esté completamente montada y la mezcla tenga una buena consistencia.

Partimos la mezcla en tres partes. A una le añadimos el café, a otra el cacao y la otra la dejamos tal cual.

Preparamos tres mangas pasteleras con tres boquillas redondas grandes (si no teneis del mismo tamaño no pasa nada, y si no teneis boquilla redonda con hacerle un corte de unos 2cm a la manga es suficiente ) y ponemos en cada una una mezcla.


Para el sirope:

Ponemos en un cazo a fuego medio todos los ingredientes, esperamos que llegue a ebullición y dejamos hervir un par de minutos.

Montaje:

Y montamos nuestro pequeño placer adulto. Ya sabeis: bizcocho, almibar, sirope y la crema de café. Y así hasta que lleguemos a la última capa. Cubrimos toda la tarta con la crema del relleno (finita, eh) y a la nevera. Mínimo media horita. ¡Y ya estará lista para ponerla de gala!

Decoración:

Seguro que much@s ya sabréis hacerla, pero para los que no, es facilísima. Vamos poniendo pegotitos de crema del mismo tamaño más o menos y con la ayuda de una espátula o cuchillo plano vamos aplastándolos.



Yo sólo he hecho los laterales, y por encima le he puesto virutas de chocolate,ummmmmm!!!



¡Y a comérnosla!!! De verdad, os lo digo, y no es broma, si os gusta muuucho el café y os gusta muuuucho el chocolate....¡¡NO LA HAGAIS!!! ¡Porque no quedarán ni las migas!


Notas:
-La crema de café para mi gusto ha quedado demasiado suave, creo que para la próxima vez, añadiré más café.

Besazos a mogollón.


Eva.